Hoy pareciera que el mundo dejó de sonreírme como lo había estado haciendo los últimos días. El dolor corporal me invadió de una manera intolerable pero como siempre, fingir que todo estaba bien me ayudó a sobrellevar el día.
No quise mencionártelo como tal, pues el que me dijeras que me extrañabas desde temprano y quisieras verme, para mí fue maravilloso. Por ello, no me puse a indagar qué me ocurría como tal, solo pensar en el: ya pasará.
Fue un día bastante pesado laboralmente, pero esa sensación desde temprano no ayudó del todo.
Parece un ardor corporal, un cansancio intenso y ese dolor de cabeza que no deja concentrarme. Por momentos una tristeza que no entiendo la razón de presentarse tampoco. Pareciera además, que estoy cargando con algo en la espalda jaja…
Por un momento pensé nuevamente en “la negatividad” que Liz comentó que me hacían. Pero honestamente ya no sé ni qué pensar.
Quisiera aislarme, no hablar y mantenerme dormida. No entiendo la razón emocional pero la razón física me impide intentarlo.
Tuve que cancelarte. Discúlpame. Era mi ilusión verte el día de hoy. Sin embargo, mencionaste sentir algo similar y es cuando las cosas no cuadran del todo.
¿Por qué solemos sentirnos similar? Ya sea el dolor físico, el emocional… pareciera que estamos conectadas todo el tiempo. Dejamos de comer, dejamos de sentir motivación, dejamos de creer que todo estará bien.
Tuviste hoy tu cita psicológica y realmente espero que te haya ido muy bien, aunque no hablamos mucho de ello, pero me llamaste y fue tan lindo escucharte.
Habría preferido estar contigo físicamente aunque no habláramos, no mencionáramos nada pero únicamente sentir tu presencia cerca.
Te extraño.
Tuve que dormir para poder calmar estas sensaciones. No pensé que pasaría tanto tiempo pero ya no pudimos hablar… lo siento.
Desperté y mi reacción fue tomar el celular y buscarte pero tenía un mensaje tuyo:
Gracias por estar siempre para mí, por apoyarme en todo y por amarme de esta forma tan incondicional. Eres mi apoyo, mi fuerza, mi compañera de aventuras. Te amo amor, gracias por todo. Hasta mañana.
Una sensación de nostalgia me invadió. Ya no era momento de responder. Quisiera estar contigo en este momento; quisiera poder apagar esa tristeza con un beso, ese dolor con un abrazo y demostrarte cuánto te amo. Porque sé que te sientes sola; sé que no lo estás pasando tan bien. Pero también sé que haré todo lo posible por darte lo mejor de mí y demostrarte que todo este proceso, valió la pena ya que habrás evolucionado perfectamente.
Descansa, corazón.