Te amo… las palabras que jamás me cansaré de decirte cada día, varias veces al día.
Ahorita, siendo la 1:46 AM, estamos juntas. Es la segunda vez que me invitas a dormir después de pasar una tarde juntas.
Hemos hablado, conectado y concluido que estamos mucho mejor que antes. Hay amor, respeto, cariño, lealtad, comunicación…
Para mí, tú mereces lo más bonito del mundo. Gracias a Dios tenemos la oportunidad de poder tener lo necesario y un poquito más para vivir mejor. No me gusta que batalles, que las cosas que tienes y te gustan nadie te haga dudar por tenerlas. Me agrada tanto cuando estás en tu espacio, valorando ahora muchísimo tu tiempo a solas. Te juro que es maravilloso que experimentes todo esto.
Añoro tanto una vida contigo, a tu lado, disfrutando de cada momento, aprendiendo de la vida, acompañándonos en toda situación. Porque he sentido que somos un gran equipo, que nos entendemos y que podemos.
Tal vez más adelante se nos presenten algunas situaciones fuertes pero te juro que haré todo lo posible para que estemos bien.
Te amo con todo m ser; con todo lo que soy. Eres lo mejor que me ha pasado; lo más maravilloso que pude sentir.
Tu espacio. Lo haces a tu gusto, con los muebles y objetos que tú consideres necesarios para ti. Nadie tenemos el derecho a opinar diferente te sobre tus cosas. De hecho me encanta el buen gusto que tienes para todo mi amor. Está quedando precioso.
Remigio está muy bien también. Aunque en semanas pasadas se nos enfermó. Pero todo mejora mi amor y eso me encanta porque verte Feliz es lo mejor.
Hoy hablamos también de la dependencia, pero ¿realmente crees que sea dependencia? Yo siento que estamos conociendo una nueva forma de amor y que estamos en un punto que nos entendemos más y no todos lo ven así, estamos más conectadas, enamoradas…
Gracias por ser tú, sin barreras conmigo; gracias por ser lo mejor que me ha pasado en la vida después de Laika y mis bebés.
En este momento ya duermes mi amor y te ves preciosa. Como mi hijo también. Los amo!
Para ti, siempre. 